Tras los atentados en Bruselas el 22 de Marzo de 2016, el diario Expansión me pidió que escribiese mis reflexiones sobre el tema desde una perspectiva de economía política. Es decir, no estrictamente económica, sino también considerando elementos sociales y de seguridad. También lo que significan estos ataques para la integración europea y el proyecto europeo en general. Aquí tenéis lo que me ha salido.
La idea central es la siguiente: la seguridad, la prosperidad y la libertad están intrínsecamente entrelazadas. Si no hay igualdad en términos de prosperidad y libertad, no habrá seguridad estable -y viceversa-, si la seguridad no está garantizada no habrá libertad y la prosperidad no servirá de nada.